miércoles, 17 de abril de 2019

Mi bicicleta

    Es Navidad del año 1991, mi primo Orson tiene unos cuantos dias de nacido y se esta quedando a dormir en con mi tía en nuestra casa, para ser mas precisos en nuestro cuarto, así que yo y sis tenemos que compartir cama. No puedo dormir por la curiosidad y la emoción por saber si Santa me traerá lo que le pedí,  por fin después de un rato termino completamente dormida. Me despierta mi hermana toda exaltada diciéndome que ya estaban los regalos, me paro rápidamente y veo en la puerta de nuestro cuarto mi bicicleta, por fin después de tanto tiempo de desearla la tengo es rosada con amarillo, tiene frenos, una como chicharra, los pedales son rosas y tiene unos tipos faros que con la luz de los coches se alumbra, me queda a la medida.  Le pido a mi papá que la baje, ya que yo no pude. A mi hermana  le trajeron unos patines de cuatro ruedas de esos que se ponen sobre los zapatos, así que las dos estamos ansiosas por salir un rato a la calle para probar nuestros nuevos juguetes.
    
    Sale mi mamá con nosotras para cuidarnos, no dice que podemos andar de tope a tope (ósea solamente dentro de nuestra cuadra)  mi hermana con un poco mas de trabajo andaba en los patines que se estaba acostumbrando, yo ya sabia andar en bicicleta mi papa me habra enseñado hace algunos meses. Vamos  de un lado a otro sin parar, a veces yo jalaba a mi hermana con la bicicleta. Nos hacemos a un lado cada vez que pasan coches y mi mamá de vez en cuando nos grita para avisarnos que nos hagamos a la orilla.
    En una de las tantas idas y venidas mi hermana va delante de mi, se va a dar la vuelta pero sin avisarme se me atraviesa, meto el freno con las dos manos, pero es inevitable, atropello a mi hermana con la bicicleta, mi mamá sale corriendo hasta donde estamos y ve a mi hermana en el piso llorando y raspada de las rodillas, y con la llanta de la bicicleta marcada en la pantorrilla derecha, yo también me caí de la bicicleta solo que pude meter las manos y no me raspe mucho, mi mamá nos regaña a las dos una por no fijarse y atravesarse y otra por no ir mas despacio si sabe que su hermana va adelante y  nos mete a la casa para limpiarnos las heridas.
   
    Ya no salimos en todo el día, nos tuvimos que conformar con ver la televisión y jugar con los regalos de mi primito. Aunque al día siguiente volvimos a las andadas y mi hermana se cayo de nuevo.


27/3/7

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Perdida

 Me siente perdida y lo único que quiero es a ti... Hay épocas donde siento que todo es una batalla a la cual fui mandada a la fuerza y trat...